Consejo Nacional de Morena marca el inicio de una etapa clave para el partido, rumbo al 2027.

Consejo Nacional de Morena marca el inicio de una etapa clave para el partido.

Por: Héctor Herrera, "El de la Mañanera".

Ciudad de México.— Morena celebró su Consejo Nacional con el objetivo de definir el rumbo del partido hacia 2027. El evento estuvo marcado por tensiones internas, señalamientos públicos y llamados a cerrar filas en torno a la presidenta Claudia Sheinbaum.

La presencia de Adán Augusto López, coordinador de Morena en el Senado, fue uno de los momentos más esperados. El legislador reapareció tras la polémica por los vínculos de su exsecretario de Seguridad en Tabasco, Hernán Bermúdez. A su llegada, López declaró que ya había dicho lo necesario y que corresponde a las autoridades continuar con las investigaciones. Fue recibido entre aplausos y el grito de "¡No estás solo!" por parte de militantes y dirigentes.

Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, respaldó a López y rechazó que deje su cargo. Consideró que las acusaciones carecen de sustento y las calificó como parte de un "golpeteo político".

Durante su discurso, Alfonso Durazo, presidente del Consejo Nacional, llamó a dejar de lado los intereses personales y a mantener la unidad del movimiento. Subrayó la importancia de respaldar a la presidenta Sheinbaum ante los retos por venir.

Por su parte, Luisa María Alcalde, presidenta nacional de Morena, fue clara: el partido no protegerá a nadie involucrado en actos de corrupción. Afirmó que serán las autoridades las que determinen responsabilidades, incluso si se trata de militantes.

El Consejo aprobó la creación de una Comisión Evaluadora de Incorporaciones, que revisará los perfiles de quienes busquen sumarse al partido desde otras fuerzas políticas. Su tarea será evitar el ingreso de personas con antecedentes cuestionables. Armando Bartra y Epigmenio Ibarra formarán parte de este nuevo órgano.

Al término del discurso de Durazo, una voz en el salón gritó: "¡Fuera los Yunes!", en referencia al rechazo de algunos sectores del partido hacia Miguel Ángel Yunes Márquez y su padre, exgobernador de Veracruz.

Entre las ausencias más notorias estuvo la de Ricardo Monreal, coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, quien no asistió por motivos familiares. La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, solo acudió a la inauguración y se retiró para atender afectaciones por lluvias en Magdalena Contreras.

El Consejo Nacional dejó ver un partido con tensiones, pero también con voluntad de ordenarse, cuidar su imagen y preparar el terreno hacia las próximas definiciones políticas.