Trolebús Elevado cumple tres años conectando Iztapalapa y reforzando la electromovilidad

Trolebús Elevado cumple tres años conectando Iztapalapa y reforzando la electromovilidad


Por: Inés Arroyo 

La Línea 10 del Trolebús Elevado, inaugurada en octubre de 2022 en Iztapalapa, celebra tres años de operación con más de 94.6 millones de viajes registrados, consolidándose como una alternativa rápida, segura y sustentable para la movilidad en el oriente de la capital. Su apertura fue encabezada por la entonces presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, con el objetivo de modernizar el transporte público y reducir brechas sociales en zonas históricamente rezagadas.

Actualmente, la L10 recorre 8.5 kilómetros, desde la terminal Constitución de 1917 hasta Santa Martha, con 10 estaciones intermedias, ofreciendo un trayecto de aproximadamente 20 minutos. La línea ha logrado un récord de 150,404 viajes en un solo día (14 de agosto de 2025), con un promedio diario de 115,789 traslados, cifras que muestran su consolidación como eje fundamental de la movilidad urbana.

El Trolebús Elevado forma parte de un sistema que prioriza la electromovilidad, con vehículos eléctricos que contribuyen a reducir emisiones de CO₂ y dependencia de combustibles fósiles, en comparación con el transporte convencional. Además, la línea permite una conexión intermodal eficiente, integrándose con el STC Metro, Cablebús, Red de Transporte de Pasajeros (RTP), transporte concesionado y la Línea 11, facilitando viajes entre la Ciudad de México y el Estado de México.

Usuarios como Ana Martínez, vecina de Iztapalapa, destacan que la línea les ha permitido reducir tiempos de traslado de hasta una hora, al tiempo que ofrece viajes más cómodos y seguros. "Antes tenía que tomar dos transportes para llegar al trabajo; ahora tardo 20 minutos y puedo hacer el trayecto sin preocupaciones", comentó.

El sistema también destaca por su accesibilidad, con estaciones y unidades diseñadas para personas con discapacidad y adultos mayores, así como por su operación confiable y moderna, que incluye tecnología de monitoreo y mantenimiento regular de vehículos y vías elevadas.

Desde su inauguración, la Línea 10 ha permitido un impacto social y ambiental medible, favoreciendo la movilidad en una de las zonas más densamente pobladas de la ciudad, al mismo tiempo que promueve la electromovilidad como modelo sostenible para futuras expansiones. El Gobierno capitalino ha anunciado planes para ampliar la conectividad con otras líneas y mejorar la infraestructura, con la meta de reforzar el transporte público eléctrico y moderno en toda la capital.

Con tres años de operación, el Trolebús Elevado se consolida como un ejemplo de transporte urbano eficiente, accesible y sustentable, demostrando que la innovación en movilidad puede transformar la vida diaria de miles de personas y ofrecer alternativas responsables con el medio ambiente.