Golpe a los abusos en Tulum: Profeco clausura hoteles por prácticas ilegales

Golpe a los abusos en Tulum: Profeco clausura hoteles por prácticas ilegales


Por: Inés Arroyo 

La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) desplegó un operativo extraordinario en Tulum, Quintana Roo, después de recibir múltiples denuncias de turistas y habitantes sobre incrementos injustificados en precios de servicios turísticos y productos básicos. Los resultados revelaron diferencias marcadas entre establecimientos del centro y los ubicados en el Parque Jaguar, así como diversas irregularidades en hoteles y restaurantes.

El operativo incluyó visitas a 29 establecimientos: tiendas de autoservicio y conveniencia, farmacias, hoteles, restaurantes y cafeterías. Con apoyo del programa Quién es Quién en los Precios (QQP), se levantaron comparativos que permitieron identificar variaciones significativas en tarifas y costos.

En Parque Jaguar se revisaron 22 negocios, entre ellos hoteles, clubes de playa y restaurantes. Se encontró que el precio promedio de una habitación sencilla supera los $3,500 pesos, con tarifas que alcanzan los $10,569 pesos en el "Hotel Mi Amor". Las habitaciones dobles promedian $4,771 pesos, llegando a un máximo de $13,860, registrado en "Diamante K".

En contraste, en el centro de Tulum los precios son considerablemente más bajos: una habitación sencilla cuesta entre $600 y $1,200 pesos, y una doble entre $700 y $1,400 pesos, evidenciando un margen de diferencia que afecta directamente al turismo nacional e internacional.

Ante estas discrepancias y diversas violaciones a la Ley Federal de Protección al Consumidor, la Profeco colocó sellos de suspensión en los hoteles Diamante K, Pocna Tulum, Villa Pescadores y Cabañas Playa Condesa Tulum. Las faltas detectadas incluyen falta de tarifas visibles, ausencia de términos y condiciones, inducción al pago de propina, menús sin precios, menús en moneda extranjera y falta de comprobantes de servicio.

Durante las inspecciones también se detectaron precios elevados en alimentos y bebidas. Una orden de guacamole puede costar hasta $280 pesos; una hamburguesa sencilla, más de $400 pesos; mientras que tres tacos llegan a $400 pesos. Incluso una orden de quesadillas alcanza un precio máximo de $290 pesos.

Adicionalmente, se realizaron ocho verificaciones y siete visitas de vigilancia en supermercados, farmacias y restaurantes. En la mayoría se identificaron prácticas que incumplen obligaciones básicas hacia los consumidores, como la falta de precios exhibidos y deficiencias en información sobre garantías o devoluciones. En todos los casos se emitieron recomendaciones para ajustarse a la norma.

El operativo también incluyó un análisis en tiendas de conveniencia como OXXO, 7-Eleven y GO MART. En Tulum, varios de los productos monitoreados registraron precios por encima del promedio nacional, particularmente en GO MART, que mostró los costos más altos entre las tres cadenas.

La Profeco informó que continuará supervisando la zona para evitar abusos y garantizar que los prestadores de servicios cumplan con la ley. Invitó a turistas y habitantes a presentar denuncias a través de sus Oficinas de Defensa del Consumidor, el Teléfono del Consumidor y sus canales oficiales en redes sociales.