Pemex se deslinda del escándalo por la corona de Miss Universo

Pemex se deslinda del escándalo por la corona de Miss Universo


Por: Inés Arroyo 


La coronación de Fátima Bosch como Miss Universo 2025 abrió una polémica inesperada para Petróleos Mexicanos (Pemex), luego de que la empresa compartiera en redes sociales un mensaje de felicitación que, lejos de pasar desapercibido, encendió cuestionamientos sobre posibles vínculos entre la petrolera y el certamen internacional. La controversia escaló rápidamente debido al historial administrativo del padre de la ganadora, Bernardo Bosch Hernández, actual funcionario de la compañía.

La felicitación publicada en X desató reacciones al señalar la cercanía entre Bosch Hernández y la paraestatal. Ante ello, Pemex emitió un comunicado para aclarar que el reconocimiento a la nueva Miss Universo se difundió "en el marco del entusiasmo popular" y que no existe ninguna intervención, influencia o relación con los directivos del concurso. La empresa afirmó que el mensaje no tuvo un propósito político ni comercial y que únicamente respondió al impacto mediático del triunfo.

Sin embargo, la aclaración no fue suficiente para contener el debate. El tema revivió un antecedente revelado días antes: en febrero de 2023, Pemex adjudicó un contrato por 745 millones de pesos a dos compañías, una de ellas vinculada a Raúl Rocha Cantú, copropietario de la marca Miss Universo. Aunque Pemex aseguró que actualmente no existe relación contractual alguna con esas empresas, el dato alimentó las especulaciones sobre posibles conflictos de interés.

El caso también reactivó cuestionamientos previos sobre transparencia, especialmente en un momento en el que circulan denuncias sobre presuntas irregularidades en la final del certamen. La controversia encontró terreno fértil debido al historial de Bernardo Bosch Hernández dentro de la administración pública.

Bosch Hernández, asesor en Pemex Exploración y Producción y recientemente subdirector de Gestión Ambiental, Salud y Seguridad, ya había enfrentado un fuerte escrutinio. En 2019, la Secretaría de la Función Pública lo inhabilitó por diez años por presunto enriquecimiento ilícito de 6.5 millones de pesos y lo destituyó de su cargo. El caso fue turnado a la Fiscalía de Combate a la Corrupción. Un año después, en 2020, el Tribunal Federal de Justicia Administrativa revocó la sanción por falta de sustento legal, aunque el funcionario no pudo comprobar el origen del dinero señalado. Tras el fallo, su nombre fue eliminado del Registro de Servidores Públicos Sancionados.

Con estos antecedentes, la felicitación institucional se interpretó como un gesto fuera de lugar y abrió un debate que coloca nuevamente a Pemex en el centro del escrutinio público. Aunque la empresa buscó desactivar la polémica al reiterar su compromiso con la integridad y el respeto a sus lineamientos internos, el episodio exhibe la sensibilidad del entorno y la rapidez con la que un mensaje aparentemente inocente puede convertirse en una tormenta mediática.

Mientras la conversación continúa, Pemex insiste en que no existe ningún vínculo con el concurso internacional ni con sus directivos. Pero la coincidencia entre el triunfo de Fátima Bosch, el perfil de su padre dentro de la petrolera y los antecedentes contractuales vinculados al dueño de la franquicia mantendrá el tema bajo la lupa en los próximos días.